TRASFONDO
En Saga podemos encontrar multitud de criaturas de diversos aspectos y tamaños, desde felinos a feroces osos. Sin embargo, cualquier aventurero que recorra una estepa, bosque o montaña se encontrará con una criatura muy habitual (en este caso, principalmente en bosques): el Lobo Gris. De tamaño similar a la de un perro, los lobos son criaturas que trabajan en manada, y por supuesto, salvajes. Más te vale no encontrarte sólo ante un grupo de estos animales, pues puede significar tu muerte.
ASPECTO
Los Lobos Grises son menos peligrosos que sus primos, los Lobos Negros, y su fuerza reside en el número. Generalmente veremos que se apoyan como una manada. En ocasiones podemos distinguir al macho alfa siendo de un tamaño ligeramente mayor al resto (y con más cicatrices, debido a las habituales luchas por alcanzar esa posición en la manada), pero sin muchos rasgos más a destacar.
REGIÓN
Los Lobos Grises pueden encontrarse al pie de las montañas, en bosques, y en los alrededores de pueblos y villas. También pueden encontrarse manadas de pelaje más claro en las zonas de estepa al norte de Saga.
ATRIBUTOS (Máximos)
ANÁLISIS Y MECÁNICA
En este análisis vamos a aprender a comprender el comportamiento de los Lobos Grises. Como podemos apreciar, son Bestias, es decir, no pueden ser controladas por los jugadores (aunque siempre existen excepciones).
Por lo general, podremos disponer de diversas bestias. Si mantenemos el criterio dado en las cartas, podremos disponer de diez bestias:
· 3 Lobos Grises
· 3 Lobos Negros
· 2 Smylodon
· 2 Cancerberos
En consecuencia, podemos determinar de manera aleatoria cual sale. Los Lobos Grises saldrían con un 1, 2 ó 3, en este caso (aunque recordad que siempre podéis variar su disponibilidad: ¡vuestra arena es completamente personalizable!)
Los Lobos Grises, al igual que las demás bestias, se despliegan de manera aleatoria, encarados también aleatoriamente. Una característica a tener en cuenta es que siempre que tengan en su Línea de Visión a otro Lobo Gris, tratarán de ayudarle en combate. Por lo tanto, si no queréis veros rodeados de lobos intentad manteneros fuera de su Línea de Visión.
Sin embargo, los lobos son bestias precavidas, y buscarán a los combatientes contra los que estar en ventaja: estén derribados o sean poco populares serán su preferencia, y si no ven a un combatiente fácil, pues darán literalmente un paseo (no os sorprendáis si se ponen a olisquear una pared o una columna: es su naturaleza).
Y algo a tener en cuenta es que pueden dar grandes saltos (saltar parte de un foso para alcanzar a un enemigo, por ejemplo, o esquivar terreno difícil). Eso sí, tiradle a un foso y se divertirá peleando con otro combatiente (pero procurad que no sea un hincha: ¡Que se lo come!
ÚSALO EN TU FAVOR
Existen formas de evitar a estas bestias. El Amuleto de la Bestia impedirá que te ataquen, y en un hechicero es algo vital, pues nos permitirá seguir usando la magia evitando ser trabados y, en consecuencia, inutilizados.
Otra alternativa es emplear una Corona de la Bestia. Si queremos una banda que controle a los animales, es un elemento muy carismático a incluir, y nos permitirá controlar a nuestra voluntad a una bestia cercana, así que, si veis a un grupo de Lobos Grises, podéis trabar a uno de ellos contra el enemigo, que el resto irá después.
Ya si jugáis con cartas beta, tenéis al Druida Elfo, que permite invocar lobos de este tipo, y combinando con la Corona de la Bestia podéis montar una auténtica jauría de lobos con la que saturar al rival.
Si los Lobos os estorban, también tenéis la opción de utilizar a los Hinchas en vuestro favor. Al ser los combatientes de menor Popularidad, pueden ser el cebo perfecto para que los lobos se entretengan. Para que luego digan que los hinchas no son útiles...
Y poquito más que añadir. Una bestia inofensiva en general, pero como con todo, no hay que subestimarla. Esperamos que os haya servido, y que ahora podáis ver con otros ojos a los lobos grises.
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